Se siente impotente, no sabes que hacer y te raya, te enoja, Porque te das cuenta de que las cosas no son como pensabas cuando eras más pequeña y todo eso. Y sólo existe el malo y el bueno. Y que el mundo es un lugar donde hay que luchar para poder sobrevivir. Demasiado complicado para explicarlo así, un día la tenés, otro día la perdés, pero, ¿Quien la conserva? ¡Ah! ¿La felicidad? ¿Quien la tiene? Nadie. Puede ser tan difícil de tenerla y tan fácil de perder. Una vida entera paso buscándola, rogándole, llorándole, adorándola, abrazándole y pensando la manera de tenerla y nunca volver a soltarla. Triste pero cierto, mi mente ya esta aturdida. Mi corazón estalla, está acabada la partida. Di más de mil vueltas a esto, y mira, creo que lo más normal es no buscar una salida. Perdí la cuenta de las noches tristes, esas noches que pasas meditando mientras el tiempo vuela (Y NO LA ENCUENTRO) Algo que todos buscamos la vida se hace más lenta, unos dicen tras el dinero, yo creo que no se dan cuenta. Ciegos definitivamente robots, somos esclavos del tiempo, muchos no sabemos quienes somos, donde vamos, que queremos, que pensamos, ó donde mierda estamos. ¡PRESOS! De la rutina, la esperanza, la ilusión, de la venganza, y un corazón que late por sentir algo de pasión. (Voy buscando felicidad entre los recuerdos que tengo de un pasado un tanto alegre y con los que me siento libre. Escribo por desahogarme y sacar de mí esta mierda que dentro me esta matando y fuera, al menos se que se alejará de aquí. Se que puedo sin ella, que puedo reír sin ella, pero me molesta el verla y no poderla tocar como si fuera una estrella). Cerrando los ojos intente recordar como se vuelve a eso que llaman felicidad. Si las lagrimas pudieran hablar, si volviera a soñar que no existe la realidad, ojala descubriera la manera de no ver, de seguir siendo esa niña que destroza tu querer. No pensar en los errores que haya cometido y al llegar la noche dormir en un sueño perdido. Recaer y renacer, amanecer y atardecer, enamorar y enloquecer de ver ¿¡Que!? Que la vida sigue siendo tan triste como ayer. Ahora siento que te digo y descubro la verdad, me despierto cada día pensando que no es real, imaginando que me puedo ilusionar que la niña que hay en mí aún sabe soñar. Pienso que es tan complicado mantenerse en pié cuando el mundo grita y se vuelve mas fe. Y me quedo sola sin tiempo para soñar, tragándome los silencios que se quedan atrás. Esto más que una protesta es un querer y no poder, tan solo ver, tanto sufrir es lo que me hace perecer. Buscando algo oculto, peleando con la vida, por estar con ella un día y llegando hasta el insulto y llorando en el disgusto y muriendo ya del susto. ¡Ah! Cada acción en esta vida es por querer rozar su piel, cada pasó en este rumbo es por querer ser como aquel, aquel que envidio y que nunca seré. Aquel que nunca sufre, aquel que nunca llora, aquel que siempre ríe, siempre sigue y nunca para, ese que sin dudarlo camina sin prejuicios, ese que sin pensarlo puede salir del vicio, ese que ante todo ríe y ante nada llora. Y ANTE NADA LLORA.